Este precioso collar de solapa de diseño victoriano vintage presenta aprox. Topacios de 3.50 quilates acentuados con perlas, bellamente elaborados en parte trasera de 9k y frente plateado.
Detalles: ±3.50ct Topacios, Perlas, 9k, Collar de Plata.
Era del diseño: Vintage victoriano.
Peso en gramos: 8.5.
Estado: Excelente estado - apenas usado con mínimos signos de desgaste.
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Era del diseño | |
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Diseño y contexto histórico | La Era Victoriana fue una época de gran florecimiento cultural y artístico en Inglaterra, y esto se reflejó en la joyería de la época. Durante la era victoriana, comenzó a surgir una clase media, lo que provocó una demanda de joyería en el mercado masivo. Las tendencias de joyería durante este tiempo a menudo reflejaban el tono de los eventos actuales. La Era Victoriana generalmente se divide en tres subsecciones: el Período Romántico (1837-1861), el Gran Período (1861-1880) y el Período Estético (1880-1901). Durante el período romántico, las joyas presentaban diseños inspirados en la naturaleza similares a los de la era georgiana y se caracterizaban por sus detalles intrincados y delicados. Los medallones y broches eran populares para usar durante el día, mientras que las piedras preciosas de colores y los diamantes se usaban por la noche. Durante el Gran Período, conocido como la era victoriana media, la joyería a menudo estuvo influenciada por la muerte del esposo de la reina Victoria. Muchas piezas de joyería de este período tienen diseños solemnes y sombríos y cuentan con piedras oscuras y pesadas como el azabache, el ónix, la amatista y el granate. Este período también vio el surgimiento de diseños coloridos y altamente creativos utilizando conchas, mosaicos y piedras preciosas. Durante el Período Estético, los joyeros usaban diamantes y gemas brillantes y femeninas como el zafiro, el peridoto y la espinela. Los diseños de estrellas y medias lunas, así como elaborados alfileres de sombreros, también eran populares. Algunos estudiosos creen que el Período Estético comenzó antes, en 1875, y terminó en 1890. |
Materiales clave | |
Materiales y artesanía | Topacio: la gema de la claridad y la fuerza El topacio, conocido por su brillante claridad y amplia gama de colores, es una piedra preciosa que simboliza fuerza, curación y abundancia. Si bien es naturalmente incoloro, el topacio se puede encontrar en una variedad de tonos que incluyen amarillo dorado, azul, rosa e incluso un raro rojo, algunos colores resultan de procesos naturales y otros se mejoran mediante tratamientos. Históricamente, el topacio se ha asociado con poderosas propiedades metafísicas. En el antiguo Egipto, se creía que era un regalo del dios sol Ra, que ofrecía protección y curación. Se cree que el nombre "topacio" deriva de la palabra sánscrita "tapas", que significa fuego, o de la antigua isla griega de Topazios, donde se extrajo la piedra por primera vez. En la joyería moderna, el topacio se valora por su brillo y versatilidad. Con una dureza Mohs de 8, el topacio es lo suficientemente resistente para el uso diario, lo que lo convierte en una opción popular para anillos, colgantes, aretes y pulseras. El topacio azul, en particular, se ha convertido en uno de los favoritos por su color fresco y calmante, a menudo engastado en plata u oro blanco para realzar su brillante claridad. El topacio es más que una simple piedra preciosa; es un símbolo de claridad, resiliencia y energía positiva. Ya sea elegido por su color vibrante o por sus profundos significados simbólicos, el topacio es una elección elegante y significativa para joyería que es a la vez hermosa y duradera. Perla: La joya de la elegancia y la pureza Las perlas, con su brillo natural y su belleza atemporal, son una de las piedras preciosas más veneradas del mundo. A diferencia de otras gemas, las perlas son orgánicas y se forman dentro del tejido blando de moluscos como ostras y mejillones. Su proceso de formación da como resultado una gema suave y redonda con un brillo suave e iridiscente, a menudo denominada "esencia de perla". Históricamente, las perlas han sido un símbolo de pureza, sabiduría y riqueza. En la antigua Roma, se consideraban el máximo símbolo de estatus, mientras que en la antigua China, se creía que las perlas protegían contra el fuego y los dragones. Durante el Renacimiento, las perlas eran tan valoradas que estaban reservadas para la realeza y la nobleza, simbolizando la perfección y la integridad. En la joyería moderna, las perlas son apreciadas por su elegancia clásica y versatilidad. Se encuentran comúnmente en una variedad de colores, desde el tradicional blanco y crema hasta los raros tonos negro, rosa y dorado. Las perlas a menudo se ensartan en collares, se colocan en aretes o se usan como detalles delicados en anillos y pulseras. Su suavidad, con una dureza de Mohs de 2.5 a 4.5, requiere cuidados delicados, pero su belleza y sofisticación son inigualables. Las perlas son más que una simple joya; son un símbolo de gracia, pureza y estilo atemporal. Sus orígenes naturales y su discreta elegancia los convierten en una opción muy apreciada para la joyería que irradia refinamiento y sofisticación. 9k: la opción asequible y duradera con un sutil tono dorado El oro de 9k es una opción rentable y resistente en el mundo de la joyería fina, particularmente popular para quienes buscan la apariencia del oro a un precio más accesible. El "9k" indica que el oro está compuesto por un 37.5% de oro puro, y el 62.5% restante está compuesto por metales aleados como cobre, plata, níquel o zinc. Esta mayor proporción de metales aleados da como resultado un material más duradero y duro, lo que convierte al oro de 9k en una excelente opción para el uso diario. Históricamente, el oro de 9k se ha visto favorecido en regiones como el Reino Unido y Australia, donde está legalmente reconocido como oro. Ofrece un equilibrio entre el lujo del oro y la practicidad de los metales más asequibles, haciéndolo accesible a una gama más amplia de personas. En la joyería moderna, el oro de 9k es apreciado por su durabilidad y su color sutil. Si bien su contenido de oro es menor que el del oro de 14k o 18k, aún conserva un tono dorado cálido, aunque es un poco más pálido. El color del oro de 9k puede variar según los metales utilizados en la aleación: Oro amarillo: el oro amarillo de 9 quilates tiene un color dorado más suave y tenue en comparación con los oros de mayor quilates, pero aún conserva la calidez y el atractivo clásicos del oro. Oro blanco: El oro blanco de 9k tiene un ligero tinte dorado debajo de su acabado blanco, que a menudo se realza con un baño de rodio para darle una apariencia más brillante y plateada. Oro rosa: El oro rosa de 9k, elaborado agregando más cobre a la aleación, tiene un delicado tono rosado que es un poco más apagado que el oro rosa de mayor quilates, pero aún tiene un encanto romántico. El oro de 9k se usa comúnmente en anillos, aretes, pulseras, colgantes y otras joyas diseñadas para el uso diario. Su mayor durabilidad significa que es menos propenso a rayarse y doblarse, lo que lo convierte en una opción práctica para piezas que se usan con regularidad. El oro de 9k es más que una simple alternativa asequible; es un símbolo de lujo práctico y elegancia cotidiana. Su durabilidad, combinada con su color sutil y cálido, hace que el oro de 9k sea una opción popular para quienes desean la belleza del oro con el beneficio adicional de resistencia y asequibilidad. Ya sea en un diseño simple o en una pieza compleja, el oro de 9k ofrece una opción atractiva y duradera de joyería que se puede apreciar a diario. Plata: El metal de la elegancia y la versatilidad La plata, conocida por su brillo brillante y reflectante, es uno de los metales preciosos más queridos y utilizados en el mundo. Este metal versátil ha sido apreciado durante miles de años, no solo por su belleza sino también por su maleabilidad, lo que lo hace ideal para elaborar diseños de joyería complejos y delicados. Históricamente, la plata se ha asociado con la luna y se ha considerado un símbolo de pureza, claridad y protección. Las civilizaciones antiguas, desde los egipcios hasta los griegos y los romanos, valoraban la plata por su belleza y la utilizaban para crear monedas, joyas y artefactos religiosos. En muchas culturas, también se cree que la plata tiene propiedades curativas, y a menudo se usa en amuletos y talismanes para protegerse de la energía negativa. En la joyería moderna, la plata es apreciada por su asequibilidad, versatilidad y atractivo atemporal. La plata esterlina, una aleación de 92.5% de plata pura y 7.5% de otros metales (generalmente cobre), es el estándar utilizado en joyería de alta calidad. Su durabilidad y su superficie brillante y reflectante lo convierten en una excelente opción para una amplia gama de diseños, desde piezas minimalistas hasta creaciones ornamentadas. La plata se puede pulir hasta obtener un alto brillo o darle un acabado mate, oxidado o envejecido para adaptarse a varios estilos. La plata es más que un simple metal; es un símbolo de elegancia, flexibilidad y lujo discreto. Su popularidad duradera y su amplia gama de aplicaciones lo convierten en un elemento básico en joyería que puede complementar cualquier look, desde casual hasta formal, con una gracia atemporal. |
Género | |
Peso (en gramos) | 8.5 |
Estado | Excelente estado: apenas se usa con signos mínimos de desgaste. |
Realce la belleza de sus joyas con el cuidado adecuado
Usar tus joyas es una forma especial de expresarte y agregar un toque de estilo personal a cualquier look. Sin embargo, para garantizar que sus joyas permanezcan en perfectas condiciones, hay algunos pasos simples que debe seguir para que se vean lo mejor posible.
Instrucciones generales de cuidado:
Quítese las joyas cuando se duche o se bañe, especialmente cuando esté en la playa, en el mar o en agua clorada.
Evite usar joyas mientras realiza trabajos físicos como tareas domésticas, jardinería o ejercicio.
Almacenar sus joyas en un lugar seco y fresco ayudará a protegerlas de la humedad, la suciedad y el polvo.
Mantenerlo alejado de productos químicos agresivos como la lejía, el amoníaco y el cloro ayudará a evitar la decoloración y el daño.
Limpiar tus joyas con regularidad con un paño suave ayudará a que luzcan brillantes y nuevas.
Evite exponer sus joyas a temperaturas extremas, como dejarlas expuestas a la luz solar directa o cerca de un calentador, ya que esto puede dañarlas.
Manipule sus joyas con cuidado y evite dejarlas caer, ya que esto puede hacer que las piedras se aflojen o que los metales se rayen.
Finalmente, si es posible, haga revisar y reparar sus joyas por un profesional. Esto asegurará que cualquier problema potencial se detecte y solucione antes de que empeore.
Siguiendo estos consejos, podrá disfrutar de sus preciosas joyas durante muchos años.